Familia Aliada

Forman la familia aliada todas aquellas personas que participan de
nuestro carisma y misión viviendo en sintonía y comunión
con las intuiciones de su Fundador.

Sacerdotes

Colaboradores

Niñez y juventud

Sacerdotes

 Desde el comienzo de la Alianza en el año 1925, los sacerdotes tuvieron una relación grande con el Fundador, con una participación muy activa en la vida y dirección de la Obra. Muy pronto, no sólo colaboran, sino que actúan como Directores de los Centros y grupos que se van formando.

Viven los Centros y grupos gracias al trabajo espiritual verdaderamente intenso que le dedican sus abnegados directores y muchos otros sacerdotes, que sin ocupar cargo alguno en la Alianza, humilde y silenciosamente ayudan en el campo íntimo de la dirección espiritual de las aliadas, dirigiendo los retiros espirituales, los ejercicios anuales y las correspondientes convivencias que se organizan en la institución.

Cuando vivió el Fundador formaron una asociación llamada: ”Sacerdotes de la Alianza”y su consigan era “Seminator Casti Consilii” Hoy, sin constituir una asociación propiamente tal, los sacerdotes forman parte de la familia aliada, participan de la espiritualidad y del carisma del Instituto, siguen colaborando espiritualmente con las aliadas, se organizan encuentros en los que se procura dar a conocer los aspectos más fundamentales de la institución, y para su enriquecimiento espiritual, como un día lo hiciera nuestro Fundador.

Colaboradores

Colaborador/a es la persona que participa de la espiritualidad y del carisma de la Alianza y se integra en los grupos formados con esta finalidad.
Los Colaboradores constituyen una expansión de la Alianza, son una rama de esta Obra, que viven de ella, de su mismo espíritu.
El Colaborador es consciente de que solo no puede, por eso busca la ayuda y el apoyo de un grupo para formarse, crecer, recibir y dar.

El carisma, don del Espíritu dado para bien de la Iglesia, es un modo peculiar de vivir una faceta del misterio de Cristo. “La Alianza es la vocación de la virginidad, y en ésta el amor más ardiente y más puro a Cristo Jesús” (Antonio Amundarain)

El colaborador/a se compromete a evangelizar participando de la espiritualidad, misión y rasgos del carisma, en la familia, profesión, Parroquia y ambiente social en que se desenvuelve su vida, colaborando en todo aquello que garantice la justicia, la paz y el bien común.

Niñez y juventud

Como irradiación del Carisma, nuestra MISION es: reflejar y proyectar la virginidad de Cristo y de María, con prioridad en el trabajo con la niñez y la juventud en cualquier campo y situación, fomentando el conocimiento y amor a Jesús y los principios de vida evangélica.

 ¿COMO REALIZAMOS ESTA MISION?

  • CAMINANDO Y ACOMPAÑÁNDOLES en sus respectivas etapas de crecimiento y procesos vocacionales.
  • ORANDO, porque la oración nos configura con el Señor y, por tanto, con su virginidad,
  • SUSCITANDO mediante una pastoral vocacional que particien de nuestro carisma, en los distintos estados de vida, conforme a su propia vocación.
  • ALENTANDO a quienes más lo necesitan.
  • PROMOVIENDO por todos los medios a nuestro alcance, principalmente el testimonio de nuestra vida virgen: EL AMOR GRATUITO Y PERSONAL Y LA VERDADERA PUREZA (que son las dimensiones más profundas de la virginidad)