Obediencia Consagrada (5)
¿Obediencia y libertad…?
Sí. Si se entiende bien el verdadero sentido de la libertad.
La obediencia bien entendida es la plenitud de la libertad.
«La libertad moral no es la facultad de hacer lo que se quiera, sino la capacidad que tiene el ser humano de realizar, sin constricciones, lo que corresponde a su vocación de hijo de Dios, hecho a imagen de su Creador»
(S. Juan Pablo II. 17-10-93)