Làmparas de barro

24 Mar, 2016 | Oración y reflexión

l_barro.jpg

Necesito tu presencia, un tú inagotable y encarnado que llena toda mi existencia; y tu ausencia, que purifica mis encuentros de toda fibra posesiva.

Necesito el saber de ti que da consistencia a mi persona y mis proyectos; y el no saber, que abre mi vida a tu novedad y a toda diferencia.

Necesito el día claro en el que brillan los colores y se definen los linderos del camino; y la noche oscura en la que se afinan mis sentimientos y mis sentidos.

Necesito la palabra en la que te dices y me digo, sin acabar nunca de decirnos; y el silencio en el que descansa mi misterio en tu misterio.

Necesito el gozo que participa de tu alegría, última verdad tuya y del mundo; y el dolor, comunión con tu dolor universal, origen de la compasión y la ternura.

Noticias relacionadas